La noche antes del examen

Que tonta, y que tonto tu también, no creas que te vas a librar.
¿Para que quiero librarme, si ser tonto tiene sus ventajas? Mira a nuestro tonto JNoCF, el estaba orgulloso.
Y así acabe a caballo reventado con los ojos para afuera... uno de mis últimos insultos favoritos.
Mañana tenemos ese examen de inglés con esa profesora que comenzó odiandonos, bueno, que nos empezó a odiar esas clases antes del final del primer cuatrimestre, cuando nos reñia cada vez que alguien nos hablaba.
Y ahora que me adora, me elogia los essay y Jess y Fati se empeñan en que me dará la matricula, es la víspera del exámen.
Ya sabes que yo quiero volver, la pregunta es cuánto tiempo estaré contenta, cuanto lo soportaré.
No creo que vayas a tener tanto tiempo esta vez, vamos, si es que al final tenemos tiempo de algo en el verano cada vez más lleno de cosas por hacer.
Como todos en los que al final no hago nada. Me pregunto si esa chica de verdad entendía o solo lo parecía. Aunque qué irónico si fuera a empezar a buscar algo ahora, ahora de entre todos los días que he tenido en este curso.
Ahora que solo me quedan a penas dos semanas aqui, con el examen de Lengua y el de Chino c2. No creo que pueda ni deba tocar el ordenador en lo que me queda hasta estar de vuelta en Oviedo. Porque realmente tengo que aprobar, y para eso tengo que estudiar, y pasa eso tengo que ponerme ya, irme ya a dormir, dejar por ahora las cosas que tanto me entretienen y centrarme en las que me convienen.
Con Placebo y Depeche Mode tampoco solucionas mucho.
Ni con las siestas.
No te agobies, porque sabes que puedes hacerlo y puedes hacerlo bien.
¿Será que lo que estás es nerviosa?
Será que no me creo que no vayamos a volver a ver a Vera.

Joder, conque en el siglo dieciséis deshollaban a las martas o a los visones, les ponian cabezas y patas hechas con oro e incrustaciones, y los usaban como accesorios de moda??? Cosas de la moda.
Hasta mañana, o tal vez hasta dentro de algunos días aún. Sigo buscando fotos de martas cibellinas, pero al parecer vivas no interesa fotografiarlas. Solo interesa el suave y bonito abrigo que se puede sacar de ellas.